La responsabilidad moral del médico
El señor dijo a Caín
“¿dónde está tu hermano Abel?”
Y Caín contesta
“No sé, soy yo acaso el guardián (responsable) de mi hermano.”
Génesis 4:9
Buenos días a todos.
Estimados amigos, aceptareis que hablar sobre la responsabilidad moral del médico
es un tema apasionante y complejo,y hacerlo en tan solo veinte minutos es un
atrevimiento del que aviso, ya de entrada,son responsables, al mismo tiempo, tanto
aquellos que me encomendaron el tema como yo mismo al aceptarlo.
Hoy, pues, nos toca reflexionar sobre aquello que atañe a lo más íntimo de la persona,
anuestra conciencia. Reflexionar sobre la conducta justa o la indigna, sobre las
actitudes buenas o detestables, sobre el buen proceder o el malo y no solo reflexionar
sobre nuestro comportamiento sino también dar cuenta de él a quien corresponda, al
paciente, a la familia, a los compañeros y en último término a la sociedad. Esto es
responsabilidad, sopesar, determinar y responder, algo tan escueto y al mismo tiempo
tan complejo.
Tomar decisiones es parte de nuestra vida. El ser humano lo es porque toma
decisiones, basadas no sólo en la necesidad o en el instinto, sino también en el
raciocinio y en la anticipación. Y ello conlleva, en palabras de Laín Entralgo, la
necesidad de justificar, ante uno mismo, cada unode nuestros propios actos. Este es el
primer paso de la responsabilidad.
La responsabilidad médicaprecisa del reconocimiento de unas fronteras aceptables en
nuestras propias actuaciones. Los límites de lo permitido —las fronteras—, serian
cuatro citando a Pellegrino: a) lo promulgado por la profesión (
lexartis,
códigos
deontológicos),b) la conciencia personal (creencias y valores), c) lo dictado por la
cultura (leyes y costumbres) y d) lo razonable, aquello que es posible concluir
mediante la deliberación médica, con las encrucijadas técnico-científicas y éticas que
presente. Por lo tanto el primer paso es averiguar los límites y decidir qué hacer en
ese entorno.
El segundo paso de la responsabilidad es la explicación debida a los demás.
Formamos parte de un grupo, de un colectivo, tenemos relaciones sociales, vivimos en
compañía de otros. No estamos en el desierto, otros nos dan vida y sin ellos no sería
posible nuestra existencia. Es por ello que, en el caso que nos la pidan, les debemos
aclaración de lo que hemos hecho y porqué lo hemos hechode esa o de esta otra
manera. Nada más natural.
Definida pues la responsabilidad como tal, hemos de advertir ya de entrada, que, en
el momento actual, existen varias amenazas, o si me lo permitís varias trampas, que