La Voz de las presidentas de la OMC
Avanzar hacia la igualdad: la corresponsabilidad como motor de cambio en la profesión médica
Álvaro Gª Torres
Las mujeres representan ya más de la mitad de la colegiación en nuestro país, el 61% de profesionales de la Medicina que trabajan en centros sanitarios públicos son mujeres y el 70% del estudiantado del grado de Medicina, también. Sin embargo, estas cifras descienden drásticamente en las posiciones de liderazgo en el ámbito asistencial, en las juntas directivas de las sociedades científicas o de los colegios de médicos, así como en el ámbito académico y la investigación.
Resulta evidente que el acceso generalizado de las mujeres a la profesión médica no se ha traducido en una integración adecuada en puestos de liderazgo, responsabilidad y representación institucional, lo que supone una gran pérdida de talento femenino en los hospitales, universidades, sociedades médicas y centros de investigación.
Con motivo del Día Internacional de la Mujer, que se celebra cada 8 de marzo, en la revista Profesión Médica hemos querido conocer la visión y punto de vista de aquellas médicas que ocupan las presidencias de los colegios de médicos en la actualidad, así como de las facultativas que componen la Junta Directiva paritaria de la Organización Médica Colegial (OMC). Todas ellas reclaman acciones encaminadas a fomentar la corresponsabilidad como elemento clave y transversal para educar en una igualdad real en toda la sociedad, un camino complejo pero irrenunciable que debe de estar en la agenda política y que cuenta con el impulso de la OMC.
Cambiar el modelo de conciliación y cuidados a través de una transformación social y cultural
“La mujer no está representada por igual en todos los niveles en Medicina, a más alto nivel, menor representación femenina”, asegura la Dra. Concepción Villafañez, presidenta del Colegio de Ciudad Real, quién apunta que sigue siendo más complicado para las mujeres acceder a los puestos de dirección en una sociedad que va dando grandes pasos para eliminar el machismo y reducir la resistencia del hombre a “perder poder”. “La solución pasa por ejercer la igualdad de verdad, promoverla desde las escuelas y facilitar la conciliación en todos los puestos”, afirma.
Resulta evidente que el acceso generalizado de las mujeres a la profesión médica no se ha traducido en una integración adecuada en puestos de liderazgo, responsabilidad y representación institucional, lo que supone una gran pérdida de talento femenino en los hospitales, universidades, sociedades médicas y centros de investigación
Respecto a la conciliación y el rol de “cuidadoras”, la Dra. Inmaculada Martínez, presidenta del Colegio de Médicos de La Rioja subraya que “aunque las oportunidades y el derecho son iguales para todos por cuestiones culturales y de roles familiares, la realidad es diferente y solo se alcanzará la paridad cuando haya corresponsabilidad en la familia”.
La Dra. Mercedes Hurtado, presidenta del Colegio de Médicos de Valencia, afirma que cuando se accede a los puestos de dirección, éstos “siguen siendo un mundo de hombres y se necesitan más mujeres que sean referentes para las próximas generaciones. Ante el papel hay igualdad de oportunidades, pero en la realidad no es así. Los techos de cristal, y en algunos casos de hormigón armado, existen. Ni la sociedad ni el sistema sanitario están aún preparados para ofrecer una verdadera conciliación familiar. Tiene que haber un gran cambio social y educativo para que la verdadera igualdad se produzca, y en ello juegan un papel fundamental las autoridades sanitarias y los gestores del sistema. No se trata de hacer políticas proteccionistas para la mujer sino de cambiar las reglas del juego para que la mujer no tenga que renunciar a nada.”
La Dra. Carmen Solórzano, presidenta del Colegio de Médicos de Gipuzkoa coincide en señalar que las estructuras directivas aún están “masculinizadas, lo que conlleva mayor dificultad para acceder y que no nos sintamos totalmente cómodas”. Asimismo, insiste en la necesidad de una mayor apuesta por las políticas de conciliación entre la vida laboral y personal “que siguen realizando mayoritariamente las mujeres, también la profesión médica” y que supone una de las grandes quiebras en el acceso a los puestos de dirección.
La Dra. Natividad Laín, presidenta del Colegio de Médicos de Toledo, destaca que “a pesar del cambio de tendencia, todavía a las mujeres se les asigna desde la sociedad la responsabilidad de los cuidados en el hogar y, en concreto, de los hijos fomentando un ‘parón maternal’ que dificulta retomar la carrera y ascender a los puestos directivos. Para ello –asegura– es fundamental implicar a los hombres en la paternidad y prestigiar los cuidados”.
También desde la presidencia del Colegio de Médicos de Ourense, su presidenta la Dra. Pilar Garzón, apunta a la conciliación como factor clave en el acceso desigual a los puestos de dirección y decisión. “Analizamos mucho más el coste personal que el beneficio a nivel profesional, se deben de implementar medidas que fomenten la equidad para este acceso permitiendo la conciliación en los puestos de dirección, esto facilitaría que muchas mujeres se decantasen por asumir estas tareas”.
A pesar del cambio de tendencia, todavía a las mujeres se les asigna desde la sociedad la responsabilidad de los cuidados en el hogar y, en concreto, de los hijos fomentando un “parón maternal” que dificulta retomar la carrera y ascender a los puestos directivos
Este punto de vista es compartido también por la presidenta del Colegio de Médicos de Huelva, la Dra. Mercedes Ramblado, quien considera que el cambio de mentalidad de la sociedad es imprescindible y que hay que avanzar también con medidas de conciliación familiar. En ese sentido se muestra optimista porque “a pesar de que el reparto de los cuidados sigue recayendo en mayor medida en la mujer, en las edades más jóvenes creo que se está produciendo un cambio de paradigma de los cuidados, que ahora se comparten mucho más, por lo que la mujer dispone de más tiempo para acceder a cargos que requieren mucha dedicación”.
Finalmente, la Dra. M.ª Carmen Arias, presidenta del Colegio de Médicos de Córdoba incide en la relevancia de que desde las instituciones se eliminen los obstáculos residuales que pudiera haber a la hora de ayudar al posicionamiento de las mujeres en puestos de liderazgo.
COMISIÓN PERMANENTE OMC
M.ª Isabel Moya
“La meta no es lograr una paridad en números, sino construir una sociedad que cambie el rol de la mujer en ella”
La Dra. M.ª Isabel Moya es, desde 2021, la primera mujer que accede a una vicepresidencia primera de la Organización Médica Colegial (OMC), un cargo al que accede tras presidir el Colegio de Médicos de Alicante, de la que ha sido la primera y única presidenta en 125 años de historia.
La radióloga coincide en señalar las dificultades a la hora de conciliar su desarrollo profesional con la vida personal y familiar, por las circunstancias que rodean la maternidad y el rol de cuidadora que todavía ostenta la mujer en esta sociedad.
La Dra. Moya considera que la solución no es fácil porque están involucrados aspectos culturales y de constructo social, “pero evidentemente pasa por atacar la raíz e implementar políticas que fomenten la corresponsabilidad y la conciliación no sólo para obtener un empleo y ejercer una profesión sino medidas que permitan progresar en igualdad de oportunidades. La meta no es lograr una paridad en números, sino construir una sociedad que cambie el rol de la mujer en ella, valore la corresponsabilidad y aproveche todo el talento femenino, algo en lo que trabajamos desde el Observatorio de Género y Profesión de la OMC”.
Rosa Arroyo
“Compartir los cuidados beneficia a médicos, pacientes y a la sociedad en su conjunto”
La Dra. Rosa Arroyo se convirtió en 2018 en la primera mujer en acceder a la Comisión Permanente del CGCOM, casi un siglo después de la creación de la organización. Hoy forma parte de una junta paritaria que trabaja por impulsar la igualdad real a través de distintas iniciativas como el Observatorio de Género y Profesión (OGYP).
La Dra. Arroyo considera que es necesario reflexionar sobre cuándo y por qué se produce una parada en el desarrollo profesional de las mujeres en la Medicina. Lograr la igualdad requiere de distintas acciones y de un amplio enfoque. En su opinión “tenemos que educar en la corresponsabilidad y reconocer y corregir los estereotipos y sesgos que tenemos interiorizados”.
Para la oftalmóloga, “tal y como refleja la encuesta realizada por el OGYP, casi la mitad de las personas encuestadas reconocía haber vivido o presenciado situaciones de desigualdad en el ejercicio de la profesión. Además, los resultados reflejaban que la necesidad de conciliar, en el caso de las mujeres, es la principal barrera en el desarrollo profesional y en la representación de la mujer en los puestos directivos”. Por ello, aboga por llevar a cabo acciones que fomenten la presencia de la mujer en puestos de liderazgo, crear referentes a futuras generaciones y promover la corresponsabilidad porque “beneficiaría a médicos, pacientes y sociedad en su conjunto”.
Virginia Izura
“Garantizar la equidad salarial y promover la formación en liderazgo para mujeres, será parte de la solución”
La Dra. Virginia Izura es jefa de sección en Neurofisiología en distintos hospitales de Murcia y desde finales de febrero la vicesecretaria de la Organización Médica Colegial. Desde su punto de vista, la falta de igualdad en los puestos de liderazgo y dirección tiene como principales causas: la falta de oportunidades y como consecuencia brecha salarial; la falta de modelos a seguir; la desigualdad en la distribución de tareas en los ámbitos familiares y los sesgos y estereotipos de género.
En su opinión, las soluciones pasan por implementar políticas que garanticen la equidad salarial y de oportunidades para hombres y mujeres en todos los niveles de la profesión médica, proporcionar programas de formación en liderazgo específicos para mujeres y establecer programas de mentoría que ayuden a las mujeres a desarrollar habilidades de liderazgo, fomentar un entorno inclusivo que valore la diversidad de género y promover activamente la participación de mujeres en roles de liderazgo.
Asimismo, considera fundamental que exista transparencia en la toma de decisiones a través de procesos de selección y promoción transparentes que minimicen los sesgos de género y garanticen una evaluación justa y objetiva de las capacidades y logros profesionales, y finalmente de un cambio cultural.
